La idea nació en la cámara de los representantes del estado de Texas a través de su miembro permanente Al Edwards. Según Edwards la ley se le ocurrió después de haber asistido a varias competiciones escolares donde pudo observar como las animadoras meneaban insistentemente la parte del cuerpo donde la espalda pierde su nombre. «Esos bailes son muy sexuales, y deberían estar prohibidos en los colegios e institutos», declaró el representante a los medios de comunicación locales.
Para Edwuards pedirle a los adolescentes que mantengan la virginidad hasta el matrimonio y consentirles que luego actúen así supone toda una contradicción en su educación. «Los profesores promueven la castidad entre sus alumnos pero permiten las vulgaridades en el campo de baloncesto o de fútbol», afirmó el político.
Bienvenidos al país donde bailar meneando el culo es delito, pero dejar jugar con un revólver a un niño de 5 años no.
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