Tamaña desgracia es incomensurable. ¡Se han roto los cascos del iPod! En realidad funcionan todavía (los estoy usando ahora mismo con el portátil y se siguen oyendo de lujo), pero como veis se ha rasgado el plástico de fuera y los cables andan al aire. Así que dudo que los vuelva a usar, necesitaré unos nuevos.
Como pijo fashion-whore, me pasé por el Corte Inglés a ver cuánto valían unos nuevos, y obviamente no eran baratos, creo que costaban 35 euros o así. Tranquilos, tan loco no estoy, no los he comprado. Por casa debo tener algunos negros sosos de toda la vida.
No me hace gracia, de todas formas. Imaginaos que os venden un Ferrari, pero que por fuera parece un seiscientos. ¿A que no os molaría? Pues esto es igual, lo importante será el iPod, pero lo guay de lucirlo también se paga. No es lo mismo fardar de auriculares blancos que dicen hey, tengo un iPod ^^
que llevar unos normales que no dicen nada. Cuando compras un producto Apple, igual que cuando compras un Ferrari, también estás comprando imagen. Por eso suelo decir que el día que me compre un Mac lo tendré de exposición en la estantería, porque no lo usaría para nada, pero fardaría tela con él xD.
Echaré de menos estos cascos…
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